julio 2, 2019 a las 3:25 pm
#10037

Superadministrador
Precisamente, el ejercicio pone en juego una observación tal, que de algún modo todo juicio o prejuicio desaparece: uno/a permanece en la experiencia, tal como es, y todas las ideas previas quedan en suspenso para darle voz al arándano mismo. ¡Qué bueno que te haya susurrado algún secreto al oído! Gracias por el comentario.
-
Esta respuesta fue modificada hace 3 años, 11 meses por
Gabriel Schutz.