agosto 8, 2019 a las 12:50 am
#10512
Participante
Fue muy interesante oler, sentir, saborear e incluso oír la pasa. De hecho se convierte en un manjar. Practiqué el mismo ejercicio contemplando una flor, percibí su perfección, su belleza, su textura. Se convirtió en un momento cautivador.