El buen uso de las representaciones

[María Lucía Moreno Sánchez]

En noviembre de 2009 resolví que era momento de jubilarme y mi gran sorpresa fue haberlo logrado fácil y rápido; en virtud de que mantendría mis clases en la escuela particular no me ocupé de recuperar mis fondos de ahorro (Afore) hasta hoy que tengo el tiempo y la decisión de emprender la batalla administrativa.
Esta “batalla administrativa” es la representación que me arrebata pues ya en otras ocasiones he experimentado ese ir y venir de documentos, oficinas y salas de espera.
Sin embargo, a diferencia de otras ocasiones, en esta me sentiré acompañada de las recomendaciones que Marco Aurelio ofrece para el buen vivir.

Si te afliges por alguna causa externa, no es ella lo
que te importuna, sino el juicio que tú haces de ella.
Y borrar este juicio, de ti depende. Pero si te aflige algo que radica en
tu disposición, ¿quién te impide rectificar tu criterio? VIII.47

Así que asumiré esta ruta de recuperación de Afore con buena disposición y en la convicción de que cuento con los documentos y los asesores indicados para liberar este trámite.
Me parece que mi representación cataléptica tiene relación con el destino que daré a ese dinero: cooperar para comprar una casa cercana a la playa.
Mi antídoto para vivir las esperas en las salas de las oficinas serán mis libros y escritos para sortear las circunstancias del verano que está por llegar. Así, al concluir esta semana escribo siguiendo a Marco Aurelio:

Hoy me he librado de toda circunstancia difícil,
mejor dicho, eché fuera de mí todo engorro, porque éste no
estaba fuera de mí sino dentro, en mis opiniones. IX.13

En estricto, el trámite será como corresponde, soy yo quien debe mantener la serenidad y hacer lo que está a mi alcance para que avance. Lo que esté a mi alcance sin echar mano de las monedas ni de las tarjetas que ofrece Daily Stoic. Ancient Wisdom for every day life, página de seguidores del estoicismo que encontré mientras realizaba esta tarea.
Más útil me ha parecido leer a Marco Aurelio y darle sentido a algunas de las cuestiones que enfrento en el día a día.

[Gabriel Schutz]

La manera como has encarado este asunto administrativo parece impecable.

En primer lugar, asumirlo (aceptarlo, así sea desagradable); en segundo, restarle todo juicio que lo vuelva pesaroso; en tercero, tener muy clara la finalidad del trámite, las posibilidades que éste abre y que fungen como motivaciones para hacerlo. Por último, prepararse para sobrellevar el aspecto operativo del trámite con la mejor disposición. Y qué mejor que tener a Marco Aurelio de compañía.

Armada de todo esto, ¿cómo podría perturbarte una cosa así?

Bravo, muy buen trabajo. Espero que toda esta artillería te permita atravesar el asunto en completa tranquilidad. Ya me contarás (si quieres).

[Autor]

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